Influencia Social

"Los héroes son los que de alguna manera pueden resistir el poder de la situación y actuar por motivos nobles, o se comportan de manera que no hacen degradar a otros cuando fácilmente pueden"

Las Neuronas

"Es preciso sacudir enérgicamente el bosque de las neuronas cerebrales adormecidas; es menester hacerlas vibrar con la emoción de lo nuevo e infundirles nobles y elevadas inquietudes". Ramón y Cajal

El cambio "Duele"

"La curiosa paradoja es que cuando me acepto a mi mismo puedo cambiar".Carl Rogers.

Inteligencia Emocional

"La infancia y la adolescencia constituyen una auténtica oportunidad para asimilar los hábitos emocionales fundamentales que gobernarán el resto de nuestras vidas" Daniel Goleman

Nuestros pensamientos

"Todo lo que somos es el resultado de lo que hemos pensado; está fundado en nuestros pensamientos y está hecho de nuestros pensamientos". Buda

viernes, 22 de mayo de 2015

Un poco de Gestalt

Y ahí te enfrentas, solo, delante de esa persona desconocida que, en pocos minutos, se convertirá en la persona que le ponga voz a los sentimientos más profundos y desconocidos que hayas tenido nunca. Las emociones que generan pensamientos; y éstos, cual bucle magnético, vuelven de nuevo a producir emociones.

Esa sensación desagradable, ese nudo que te aprieta y oprime, enérgicamente, poderosamente. El dolor lo percibes, pero no sabes de dónde proviene. Solo quieres deshacerte de él. Quieres huir, ya sea en la mentira, en la verborrea, en la distraibilidad de algún pensamiento que te lleve a cualquier lugar, en el sueño, en el olvido… cualquier cosa para escapar de lo síntomas físicos a los que te están conduciendo tus pensamientos.

-       “Quédate ahí”
-       “¿Perdón?  (Quizás no haya entendido bien)
-       Quédate ahí. ¿Cómo es ese dolor?
-       “¿De veras me está diciendo que no huya ante esta sensación, ante este dolor desgarrador que me oprime todas las partes de mi cuerpo?
-       “Sí. Quiero que respires, quiero que le des sonido a este momento, que identifiques qué es lo que sientes y qué emoción es la que hace que sientas esos síntomas en tu cuerpo”
-       “Miedo”
-       ¿Dónde lo sientes?
-       “Aquí, en mi pecho, profundo, justo a la altura del esternón
-       “¿Y cómo es?”
-       ¿Cómo que cómo es? Es desagradable, molesto, tortuoso, desgarrador, escabroso, doloroso, intenso, punzante, agudo, penetrante... eterno.
-       “Cuéntame……”


No tratar de huir de los síntomas que las emociones, desencadenadas por los pensamientos, producen en tu cuerpo. ¿Por qué es esto?

Identificar una emoción como negativa es un mecanismo adaptativo para que nos alejemos de lo que nos produce mal. Y eso necesariamente se consigue cuando tu cuerpo experimenta un malestar; del mismo modo que el sexo genera placer con la única finalidad de perpetuar la especie. Si el sexo fuera desagradable ni tú ni yo estaríamos aquí en estos momentos.

Llegas a casa. Ha sido duro, intenso y liberador. Has sido tú enfrentándote a tus miedos, descubriéndote, mirándote a la cara viéndote sangrar, identificando la procedencia de esas emociones desgarradoras, sintiéndolas, dándoles ese espacio suficiente para relacionar sentimiento, sensación y emoción.

Ahora te toca a ti, emprender el camino al renacer. Y ahora sabes cómo empezar. Ahora vas a lograrlo.


domingo, 10 de mayo de 2015

Ese pensamiento que hay que cambiar..

¿Somos lo que pensamos? Nuestros pensamientos pueden sanarnos o enfermarnos? ¿Podemos hacer una reestructuración cognitiva? ¿Es eso real?
Sin conciencia de nuestros pensamientos, y de los estados emocionales que éstos generan, por un lado se presentarán reacciones fisiológicas determinadas que van a generar un sentimiento y, por otro lado, este sentimiento generará de nuevo una cognición determinada que, si no lo evitamos, será similar al pensamiento desencadenante.
Normalmente no somos conscientes salvo del sentimiento que provoca toda esta reacción en cadena. Pero ante ese sentimiento consciente subyace un estímulo, que bien puede ser externo o interno (pensamiento) que es el generador de tus sentimientos.
¿No te sería fácil cerrar los ojos y elevar tu ritmo cardíaco con un pensamiento? Yo creo que sí. Lo has hecho "a la inversa". Primero has tomado conciencia de la emoción que querías generar y esa emoción generó el sentimiento esperado.
¿A qué viene todo esto?
Sé que somos lo que pensamos, y que esos pensamientos pueden sanarnos o enfermarnos. Y sé que si somos capaces de modificar y modular nuestros pensamientos podemos cambiar las cosas. Pero no me había dado cuenta hasta ahora que para que ello ocurra, para que comencemos a ser conscientes de qué estímulos (pensamientos) provocan una emoción determinada en nuestro organismo, qué componentes fisiológicos se ponen en marcha con esa emoción (aumento de ritmo cardíaco en el caso de miedo) y qué cognición (sentimiento) provoca todo esto es necesario que antes haya sucedido algo importante. Antes ha tenido que generarse un pensamiento.
Claro, parece una chorrada. Si le dices a alguien que no es feliz, o que se encuentra deprimido o ansioso, (no que tiene depresión mayor o algún trastorno de ansiedad, en cuyo caso habría que complementar la terapia con otras técnicas) que si cambias los pensamientos su vida cambiará parece lógico que inmediatamente se pondrá a ellos, ¿cierto?
Peor entender el concepto no es suficiente. Hay que hacer una introspección, detenerse y leer y escuchar la mente. Es tan fácil como que una sola persona con una pala llene un tráiler de arena. Es fácil, pero requiere un trabajo y un tiempo. Requiere constancia y determinación. Después notarás cómo una mueca en tu rostro, generada por una emoción, generada por un pensamiento positivo, te generará un pensamiento de felicidad por estar lográndolo.